El aumento de casos de coronavirus (COVID-19) viene aumentando rápidamente a nivel mundial. Esto llevó a que los gobiernos fueran implementando medidas radicales para frenar su avance y esto en muchos casos ha llevado a un marcado enlentecimiento en la economía.

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (“OCDE”) plantea que la prioridad inmediata es una rápida respuesta para apoyar a los hogares y mejorar la liquidez de las empresas y de tal forma poder mantener la capacidad productiva de las economías lo más intacta posible. Los gobiernos podrían considerar una variedad de políticas y medidas fiscales a estos efectos.

Las siguientes medidas planteadas por la OCDE (quien aclara que no son recomendaciones), están destinadas a ayudar a los gobernantes para que evalúen su implementación si es que se adaptan a su contexto nacional:

• Proporcionar temporalmente pagos de asistencia social más generosos y apoyo a los ingresos.
• Renunciar o diferir las contribuciones a la seguridad social del empleador y los autónomos, así como los impuestos relacionados con la nómina.
• Proporcionar concesiones fiscales para los trabajadores de la salud y otros sectores relacionados con emergencias.
• Diferimiento de pagos de IVA, aduanas o impuestos especiales para artículos importados.
• Acelerar los reembolsos del exceso de IVA.
• Simplificar los procedimientos para reclamar devolución del IVA sobre deudas incobrables.
• Ajuste de los pagos anticipados requeridos sobre la base de una obligación tributaria esperada.
• Diferimiento o exención de impuestos que se recaudan sobre una base impositiva que no varía con el ciclo económico inmediato.
• Aumentar la generosidad en el arrastre de pérdidas de otros ejercicios fiscales.
• Preparación para la recuperación, incluso a través de la política fiscal.

A su vez, la OCDE aclara que, ante la prolongación del estado de emergencia sanitaria, las políticas para mantener la economía “en espera” se vuelven muy costosas y menos efectivas. En este contexto, el enfoque debería focalizarse en políticas de estímulo más tradicionales buscando reparar la confianza y estimular la actividad económica.

La OCDE también le sugiere a las administraciones tributarias ciertos puntos para aliviar las cargas de los contribuyentes y apoyar a las empresas y personas con problemas liquidez o con dificultades para cumplir con obligaciones formales o pago de tributos, como son:

• Extensión de plazos y vencimientos
• Diferimiento de pagos
• Remisión de multas e intereses
• Planes de pago de deudas
• Suspender actividades de recaudación
• Reembolsos más rápidos
• Proporcionar certeza fiscal
• Políticas de fiscalización
• Mejorar servicios
• Mejorar comunicación

Para acceder a las publicaciones de la OCDE, ingrese a los siguientes links:

• OECD – COVID-19 – EMERGENCY TAX POLICY (20/3/20)
• OECD – COVID-19 – TAX ADMINISTRATION RESPONSES (16/3/20)